Una semana más, contamos con la Doctora Barba. En esta ocasión, nos plantea si Dña. Mª Dolores de Cospedal se ha realizado o no retoques estéticos.

Hay disparidad de opiniones en cuanto a si la política se ha realizado retoques porque ha distraído la mirada con sus cortes de pelo, cambio de lado de la raya del pelo, color, etc. Pero en ojos expertos se aprecian los signos de que sí se ha realizado retoques faciales, pequeños arreglos sin cirugía que han surtido un gran efecto de rejuvenecimiento.
Cospedal no ha optado por pasar por quirófano por convicciones propias y por su apretada agenda de trabajo. Sin embargo no ha renunciado a hacerse retoques sin riesgo y con un excelente resultado en el aspecto de rejuvenecer sin sufrimiento y de forma más natural.
Es una habitual del empleo de la toxina botulínica en frente, entrecejo y patas de gallo para rejuvenecer los rasgos de expresión y que su expresión sea más dulce y menos dura o agresiva. Se aprecian estos tratamientos en la ausencia de arrugas al gesticular de a frente, el entrecejo, las patas de gallo y la definición y posición arqueada de las cejas.
Dolores es una mujer con grandes ojeras deprimidas en la región del parpado inferior que dejan hundidos los ojos. Ha sido mediante inyecciones de ácido hialurónico como se ha conseguido mitigar el hundimiento de esta zona. Es un tratamiento médico que, sin cirugía y en tan solo 15 minutos, rejuvenece enormemente la mirada.
En esta imagen se aprecia el gran cambio y rejuvenecimiento de la expresión con unos pocos tratamientos médicos estéticos sin cirugía.
Para mantener la piel luminosa y rehidratada se emplea un cóctel de vitaminas antioxidantes y ácido hialurónico no reticulado con el fin de iluminar e hidratar en profundidad la piel.
¿Qué haría yo como experta a Dolores de Cospedal? Siguiendo la tónica de no entrar por el quirófano, como parece que no es amiga la política española, le ofrecería, además de los tratamientos que ya se ha realizado, un tratamiento de blefaroplastia láser de los parpados superiores que aún rejuvenecerían más su mirada y no se vería oculta por el exceso de piel sobrante de los parpados superiores. Además, reposicionaría las mejillas y la flacidez del tercio medio de la cara, que se la cae, con unos hilos tensores faciales (por respetar su decisión de no entrar en quirófano).
Con una buena elección de los tratamientos, los resultados están garantizados.