Isabel Pantoja: un año en prisión esperando a salir en Navidad

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El pasado sábado, la tonadillera cumplió un año en la cárcel de Alhaurín de la Torre, desde que se la condenó a cumplir una pena de dos años por blanqueo de capitales dentro del Caso Malaya.

Desde su entrada, la cantante ha podido disfrutar de tres permisos. El primero de ellos  uno de cuatro días, otro de veinte y otro de seis. Nunca se le ha visto salir de casa, únicamente uno de los días de su segundo permiso, y la vez que la ingresaron en la clínica.

Siempre se ha hablado de un posible trato de favor, ya que el condenado, aunque esté cumpliendo una pena y esté enfermo, los médicos forenses, una vez conocido el motivo de su ingresos, lo remiten al hospital más cercano de la penitenciaria y evidentemente perteneciente a la seguridad social y no a un hotel privado (con habitación suite que parece que está descansando en un hotel de 5 estrellas), de hecho no está tan mal ya que cuando volvió a salir en el tercer permiso pasó su cumpleaños en su casa y tuvo una reunión con sus familiares, en la que pidió discreción y nunca más visitó el hospital.

También durante este año recordar que ha habido presas que no querían a Isabel y se habló de un trato de favor por parte de la directora del centro y todos los terceros grados que ha pedido le han sido denegados.

No es ni mucho menos el caso de Maite Zaldívar, que tiene una pena de dos años y medio, pero ella se ha declarado insolvente, está en un segundo grado dentro de la prisión de Alhaurín y en lo que lleva de pena, no ha creado ningún tipo de polémica interior, al igual que su familia tampoco lo ha creado en el exterior. En todo momento ha mostrado arrepentimiento, incluso el acta de salida firmada por el juzgado declara que la presa se ha adaptado perfectamente a la cárcel, que ha reconocido su delito y que tiene muy pocas, por no decir nulas, posibilidades de volver a incurrir en este tipo de delitos. Por el contrario, a Isabel Pantoja se le deniega el Tercer grado desde el primer día de entrada o la solicitud de, como ella quería, terminar de cumplir la condena en Cantora.

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